Mi sorpresa en Pamuri
Hace poco estuve invitada a Pampas, Tayacaja, Huancavelica por Pamuri Andes Lodge.
Además del frío y limpio aire con color a azul y cielo con olor a frescos musgos de la montaña, Pampas te recibe con calidez de corazón y dulzura en las palabras y actitudes.
Me asombraron varias cosas.
Me sorprendió el gran sistema vial andino del Qhapaq Ñan, uno de los patrimonios culturales de la Humanidad, que atraviesa Pampas, sus anchas vías con muros de contención, con escalinatas, elementos asociados como apachetas que los pobladores conocen como “hitos”, tambos, fuentes, planos en rocas, y otros; nos hablan de una geografía sagrada intervenida para facilitar la comunicación, el intercambio de formas de vida, creencias, pensamientos y sentires.
Antes definitivamente estábamos más comunicados, y eramos sensibles ante las necesidades de los otros. El sistema vial andino permitía, dialogo, comunicación, intercambio, conocimiento directo y descubrir que los otros están mas próximos de lo que pensamos.
La cultura material e inmaterial es otro tema, por cierto muy diverso y rico en Tayacaja. Los carnavales, el Santiago, Semana Santa, son tradiciones que nos hablan de procesos relacionados con la agricultura, la ganadería y el tejido.
Los objetos arqueológicos de Pampas, nos dicen de un pasado pre-inka, quizás de asentamientos locales a escalas gigantes, esa fue otra de las cosas que me sorprendieron, edificaciones circulares, pero no dos, no diez, no cien, al menos creo500 , una maravilla!
No entiendo cómo en nuestro país de una riqueza cultural, patrimonial y especialmente humana tan grande, aun tengamos tazas de pobreza tan extrema.
Es hora de apuntar a la cultura y al turismo sostenible como herramienta de desarrollo, de empuje y de seguir adelante a pesar de todo!
-Veronika Tupayachi